S1. Un fiel Mayordomo descansa en Su Señor
S1. Un fiel Mayordomo descansa en Su Señor
Sermón predicado en la Iglesia Biblica Rios de Gracia - Medellín
Mateo 6:25-34
El afán y la ansiedad (Lc. 12.22-31)
25 Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
26 Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?
27 ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?
28 Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan;
29 pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos.
30 Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe?
31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?
32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
Contenido
1. Los motivos de ansiedad y su remedio. Vs. 25-26
2. Todo está en manos de Dios Vs. 27-29 (La Providencia)
3. Una cariñosa exhortación. Vs. 30-32
4. Las obligaciones de un fiel mayordomo Vs. 33-34
1. Los motivos de ansiedad y su remedio
25 Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
26 Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?
Los creyentes somos muy valiosos para Nuestro Señor, tanto que envió a que Su Hijo amado, el Unigénito del Padre, a derramar hasta la última gota de su preciosa sangre para limpiar nuestros horribles pecados.
Esto nos dice que EL no solo nos salvó del castigo eterno, sino que siempre está con nosotros supliendo todas nuestras necesidades.
(Hagamos un paréntesis para poder seguir avanzando, ¿cual es la diferencia entre necesidad y deseo?
1 Timoteo 6:6-8 nos puede ayudar a definir la diferencia:
“6Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento;7porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar.
8Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto”.
1 Timoteo 6:6-8
Las necesidades tienen que ver directamente con sustento y abrigo, es decir: Alimento, vestido y techo.
Y si lo queremos confirmar en nuestro texto, vamos a Mateo 6: 31-32
31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?
32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.
Mateo 6: 31-32
Todo lo que exceda esto, son deseos.
También se debe hacer claridad que el Señor cumple su palabra proveyendo sustento y abrigo de la forma que el tenga establecida, de tal manera que nos puede proveer techo propio, arrendado, o prestado.
Hasta aquí el paréntesis).
Volviendo a nuestro tema que es “la ansiedad”, una de sus causas es cuando los deseos exceden nuestras necesidades, es decir, anhelamos cosas que no necesitamos, y eso significa que estamos por fuera de la Voluntad del Señor… en otras palabras, no estamos satisfechos con lo que el Señor nos da y eso es falta de contentamiento, pero ese es otro tema el cual veremos más adelante, si el Señor lo permite.
Vamos al Salmo 119:28, en donde leemos que el salmista está sufriendo por la ansiedad.
El salmista dice:
28 Se deshace mi alma de ansiedad;
Susténtame según tu palabra.
Salmo 119:28
Pero El Señor pone en su boca inmediatamente la respuesta:
“Susténtame según tu palabra”
Es como un niño que dice: “Papá tengo hambre, por favor aliméntame”… Entonces nuestro texto se puede leer así: “Dios mío estoy ansioso, por favor susténtame según tu Palabra”
El Salmista suplica al Señor que lo instruya en su ley, de tal manera que la ansiedad se diluya en el cumplimiento de la voluntad de Dios.
33 Enséñame, oh Jehová, el camino de tus estatutos,
Y lo guardaré hasta el fin.
Salmos 119:33
El salmista decidió empeñarse de todo corazón en la ley de Dios.
34 Dame entendimiento, y guardaré tu ley,
Y la cumpliré de todo corazón.
Salmos 119:34
El expresó su profunda devoción al Señor, él ama a su Señor y desea obedecerle.
Esto nos lleva a una conexión en el nuevo testamento, cuando Nuestro Señor Jesucristo dijo a sus discípulos:
15 Si me amáis, guardad mis mandamientos.
Juan 14:15
El concepto de obediencia es muy importante, pues significa poner nuestra voluntad a un lado y hacer la voluntad del Señor, que como vimos en Romanos 12:2 es buena, agradable y perfecta para cada uno de nosotros, cuando renovamos nuestro entendimiento.
2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Romanos 12:2
Volviendo a Juan 14, leemos Inmediatamente después en el verso 16.
16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre…
Juan 14:16
Y ese “Consolador” nos trae consuelo a la “Ansiedad” por medio de mostrarnos nuestros pecados, y llevarnos al arrepentimiento y a la Fe en Jesucristo como único y suficiente Salvador, es decir nos transforma por medio de la renovación de nuestro entendimiento.
¿Y eso que significa?
Significa que el consuelo del Espíritu Santo se ejecuta a través del conocimiento de la obra salvífica de Cristo, que sustenta nuestra alma, aun en las situaciones más difíciles y lo hace transformando nuestra vida.
De tal manera que comprendamos que la ansiedad o la aflicción llega cuando hacemos las cosas en nuestras fuerzas, pues de esa manera nos estamos seguros de llegar a un buen resultado.
Entonces, este es el remedio contra la ansiedad:
Amar a Dios con todo el corazón, orar permanentemente por conocer su providencia y enfocarse en cumplir con la voluntad del Señor… Esto se puede resumir en lo que dice nuestro Señor en Juan 14:15.
Si me amáis guardad mis mandamientos.
Juan 14:15
Esto es: Obediencia al Señor.
Y se logra con un corazón agradecido por la obra de Cristo en nosotros, pues si estamos profundamente agradecidos por la Salvación …
¿Que nos puede afligir, si eso es lo más importante en la vida de cualquier persona?
Pero volvamos a nuestro texto, pues tiene mucho más que enseñarnos.
2. Todo está en manos de Dios (La Providencia del Señor)
27 ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?
28 Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan;
29 pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos.
Dios está al tanto de todas nuestras necesidades y nos entrega todo lo necesario para cumplir con Sus metas en esta tierra.
Eso nos recuerda la definición de prosperidad…
Prosperidad: Contar con los recursos necesarios para hacer la voluntad de Dios en nuestra vida.
Como ven es muy distinta a la definición de prosperidad que el mundo pregona, por eso debemos asumir nuestra incapacidad y confiar en que Dios está en el control de todo.
Pues…
27 ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane,
añadir a su estatura un codo?
Mateo 6:27
Hoy algunos se preocupan por el vestido, pero es el Señor quien se encarga de eso en esta tierra y lo ha hecho desde siempre:
21 Y Jehová Dios hizo al hombre y a su mujer
túnicas de pieles, y los vistió.
Genesis 3:21
No solo cubre nuestro cuerpo, sino que cubre nuestra vergüenza por el pecado.
Y llegará un día (Apocalipsis 19:8) en el cual nos vestirá de Lino Fino, para presentarnos limpios y sin mancha en las bodas del Cordero.
El Señor nos ha vestido desde siempre y lo hará eternamente, por los siglos de los siglos.
Nos preocupamos por el alimento, pues se nos olvida, que el Señor nos da el alimento necesario
25 El que da alimento a todo ser viviente,
Porque para siempre es su misericordia.
Salmos 136:25
Y lo hace, porque para siempre es su misericordia…
Podemos decir lo mismo del dinero
¿Quien podrá enriquecerse si Dios no lo permite?
Leamos Hageo 2:8
8 Mía es la plata, y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos.
Hageo 2:8
Y leamos 1 Samuel 2:7-9
6 Jehová mata, y él da vida;
El hace descender al Seol, y hace subir.
7 Jehová empobrece, y él enriquece;
Abate, y enaltece.
8 El levanta del polvo al pobre,
Y del muladar exalta al menesteroso,
Para hacerle sentarse con príncipes y heredar un sitio de honor.
Porque de Jehová son las columnas de la tierra,
Y él afirmó sobre ellas el mundo.
1 Samuel 2:6-8
Debemos saber que la mayoría de las cosas están fuera de nuestro control, que hoy podemos gozar de buena salud y mañana estar enfermos de muerte… o que podemos tener unas finanzas muy escasas y mañana tener abundancia de dinero.
Hoy salimos a la calle y no sabemos si volveremos a ver a nuestra familia en esta tierra, quizás hoy sea el día de ponernos a cuentas con Dios.
Pero aunque nosotros tenemos poco control sobre nuestra vida y sobre el mundo en general, todo esto no está en manos de la fortuna, ni del azar.
Quizás sea hoy la última oportunidad para testificar de Cristo.
Veamos como lo dice el teólogo R.C. Sproul hablando de la providencia del Señor.
La Providencia del Señor
La doctrina de la Providencia enseña a los cristianos que nunca están bajo el control de la fortuna ciega, el azar, la suerte o el destino. Todo lo que les sucede está divinamente planeado, y cada evento viene como un nuevo llamamiento para confiar, obedecer y regocijarse, sabiendo que todo es para el bien espiritual y eterno del creyente (Ro. 8:28).
R.C. Sproul en The Reformation Study Bible.
Entonces sabemos que estamos en manos de Dios, que es quien moldea nuestra vida y planea nuestro futuro.
¿Entonces que debemos hacer nosotros?
¿Que hacemos con esa ansiedad que a veces nos afligue?
Primero echar toda nuestra ansiedad sobre EL.
7 echando toda vuestra ansiedad sobre él,
porque él tiene cuidado de vosotros.
1 Pedro 5:7
Pues sabemos que el Señor se encarga de todas nuestras necesidades.
También debemos estar siempre gozosos, esa es la orden de Pablo a los Filipenses, y nosotros sus lectores actuales.
4 Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: !!Regocijaos!
Filipenses 4:4
Ahora pregunto ¿Tenemos nosotros motivos de gozo?
¡Claro! Nos regocijamos en el Señor por su maravilloso regalo de la Salvación por medio de Cristo y porque EL tiene todo planeado en su divina providencia.
Veamos Romanos 8:28
28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
Romanos 8:28
Leemos que “a los que amamos a Dios, todas las cosas nos ayudan a bien” pero este versículo no lo podemos dejar ahí, en esa coma, si lo leemos completo vemos que tiene una explicación:
…a los que conforme a su propósito son llamados.
Esto tiene mucho que ver con la definición de prosperidad que vimos antes, significa que en la Providencia del Señor “todas las cosas nos ayudan a bien” pero conforme a los propósitos del Señor…
3. Una cariñosa exhortación
30 Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe?
31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?
32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.
Las palabra de Jesús en el texto: “Hombres de poca fe” son una cariñosa exhortación, que significan algo así:
¡Ustedes han estado conmigo mucho tiempo, han visto como el Padre nos provee de todo lo necesario, saben que nunca nos abandona y todavía no han aprendido a confiar en Dios!
Y así es en cada uno de nosotros, todavía no hemos aprendido a confiar plenamente en Dios, sabemos que en “la salvación” no tenemos ninguna participación es una obra total y exclusiva del Señor y si el tiene el control de lo más importante, también tiene control sobre lo más mínimo.
En verdad la mayoría de los asuntos se salen de nuestro control.
27 ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?
Mateo 6:27
Si bien es cierto que nuestra obligación es planear y ejecutar, es decir trabajar, también es necesario orar y confiar en la providencia del Señor.
Aun así, en ocasiones nos encontramos desorientados acerca de la voluntad del Señor, pero para eso el Señor nos ha dejado su Palabra.
16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redarguir, para corregir, para instruir en justicia,
17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.
2 Timoteo 3:16-17
Y su Palabra es suficiente, repasemos este concepto.
La suficiencia de las Escrituras: La doctrina de la suficiencia de la Escritura es un principio fundamental de la fe cristiana. Decir que las Escrituras son suficientes, significa que la Biblia es todo lo que necesitamos para equiparnos para una vida de fe y servicio. Nos proporciona una clara presentación de la intención de Dios para restaurar la relación rota entre Él y la humanidad a través de Su Hijo Jesucristo.
Ningún otro escrito es necesario para entender estas buenas nuevas, ni ningún otro escrito se requiere para equiparnos para una vida de fe y servicio.
Recordemos que Nuestro Señor dijo:
“Mis ovejas oyen mi voz y yo las conozco, y me siguen”
Juan 10:27…
Necesitamos oír Su voz y las Escrituras son Su voz
¿o necesitamos algo más?
Por eso un mayordomo que no confía en Su Señor siempre estará tratando de hacer más cosas de las necesarias, pues cree que no es suficiente con lo que Dios tiene planeado. En esta categoría entran muchas cosas como:
Ministerios paraeclesiásticos
Ministerio segregados
Obras de teatro para evangelizar
Servicios que son únicamente conciertos de alabanza
Etc..
Y cuando alguien les llama la atención, su principal arma de defensa es: “Esto que hacemos no está en Biblia, pero tampoco está prohibido, pero eso está dentro de la libertad del cristiano…”
Me pregunto que libertad tiene un esclavo que fue comprado con la sangre de Cristo, y que no clasificamos ni para siervos inútiles, pues no hacemos lo que el Señor nos manda, pero nos inventamos una serie de actividades y obras que nosotros clasificamos como “mejores para servir a Cristo”, pero no tienen un claro y explicito soporte bíblico….
10 Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos.
Lucas 17:10
Volvamos a nuestro texto en Mateo 6
4. Las obligaciones de un fiel mayordomo
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
Un fiel mayordomo descansa en su Señor y sabe que EL conoce todas sus necesidades y confía en que todo llegará a su debido tiempo.
… vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis.
Mateo 6:8
También sabe que aquello que no llegue es porque no estaba en el plan de Dios, por lo tanto no era necesario.
Un Fiel mayordomo busca el reino de Dios y su justicia
Un fiel mayordomo reconoce a Dios como único Rey y hace todo lo que EL manda, de esa manera está enfocado en la voluntad de Dios y aprende a conocer los designios de Su providencia.
Es así como un creyente va madurando en la fe, recorriendo ese camino que se torna cada día más estrecho, estudiando la Palabra, congregándose, orando y llevando el evangelio:
Leamos Hebreos 12:1-12
1 Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante,
2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.
Hebreos 12:1-2
Un fiel mayordomo se despoja de todo lo que no es necesario y se enfoca exclusivamente en Jesús, en lo que ha escrito en Su Palabra y en cumplir los mandamientos.
Es conveniente hacer énfasis en que las labores de un mayordomo son arduas y continuas, por lo general un buen mayordomo en el Reino de Dios es recompensado con más trabajo.
Es necesario que tengamos muy claro que:
Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma.
2 Tesalonicenses 3:10
Significa que debemos hacer nuestras labores diarias, pues la vida de un mayordomo no es una vida exclusiva de oración y ayuno, viviendo alejado del mundo como un ermitaño… No, no es eso, es más bien hacer como Pablo, que llevaba la Palabra de Dios a muchas partes, pero trabajaba fabricando carpas y de esa manera daba un buen testimonio a los demás y no “Comía su pan de balde”, en 2 Tesalonicenses 3:8 afirma:
8 ni comimos de balde el pan de nadie, sino que trabajamos con afán y fatiga día y noche, para no ser gravosos a ninguno de vosotros.
2 Tesalonicenses 3:8
Una mujer dentro de su rol especifico hace la voluntad de Dios, como lo vemos en proverbios 31:27-28
27 Considera los caminos de su casa,
Y no come el pan de balde.
28 Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada;
Y su marido también la alaba:
Proverbios 31:27-28
En Proverbios 31 podemos leer el “Elogio a la mujer virtuosa” esta es una descripción coherente de una mujer embellecida por sus virtudes de sabiduría práctica y caridad.
Ella administra fielmente los asuntos al interior de su hogar, por eso “no come el pan de balde” es una mujer productiva para el reino de Dios dentro de la esfera doméstica.
En resumen
Estamos hablando del equilibrio de un trabajo constante y una plena confianza en Dios que nos evita la preocupación por el futuro, pues si confiamos en que el Padre conoce todas nuestras necesidades, la preocupación no tiene lugar en nuestra vida.
Es muy importante entregar nuestra ansiedad al Señor, pues dudar de la Bondadosa provisión de Dios nos distrae de los verdaderos objetivos de un fiel mayordomo.
Esa ansiedad nos demuestra que estamos actuando en nuestras fuerzas y que por eso no estamos seguros del resultado, eso nos lleva a la ansiedad.
Cristo en este texto
Lo primero que debemos decir es que es Cristo quien de su propia boca nos entrega esta enseñanza.
Pero también lo vemos como nuestro proveedor y sustentador diario.
Es Cristo quien nos viste de Fino Lino, mejor que la más hermosa flor de la naturaleza, para presentarnos ante EL en las bodas del Cordero.
Es Cristo el amo fiel a quien servimos como mayordomos y se encarga de todas nuestras necesidades.
Aplicaciones para los hermanos
El valor de la vida del creyente no se mide por como se viste, o por lo que la clase de alimentos que consume, sino por sus prioridades con respecto al Reino de Dios. La mejor aplicación de este texto bíblico es: Trabaja muy duro pero no te preocupes por cosas materiales, enfocate en cumplir la voluntad de Dios.
La ansiedad y las preocupaciones nos alejan de nuestras verdaderas prioridades como mayordomos. Las preocupaciones por las cosas materiales nos distraen de lo verdaderamente importante, si el Señor prometió sustento y abrigo para quienes lo sirven, entonces debemos descansar en EL y dejar ese tema en Sus manos.
Preocúpate por el reino de Dios, que Dios se encargará de tus necesidades. El Señor sabe lo que necesitamos para cumplir con Sus propósitos en esta vida, por eso debemos confiar en que EL suplirá todo lo que sea necesario, la parte que nos corresponde a nosotros es ser unos fieles mayordomos, ocupados en el avance del Reino de Dios.
Aplicaciones para los amigos (No creyentes)
La historia de George Muller (1805-1898)
George Muller fue un hombre que dedicó la vida al servicio del Reino de Dios, por medio de la creación de orfanatos en varias ciudades de Inglaterra.
Aunque era hijo de un hombre adinerado, nunca recurrió a su padre terrenal para financiar los hogares infantiles, él sabía que si era la voluntad de Dios los orfanatos prosperarían.
Efectivamente su ministerio fue prosperado por el Señor quien escuchaba las oraciones continuas del siervo George y su esposa, para suplir las necesidades básicas.
El y su esposa fueron diligentes en no contraer deudas, pues deseaban dar testimonio de su plena confianza únicamente en el Dios Viviente. Al cumplir el primer año de vivir así, descubrieron que habían recibido más de lo que solían ganar recibiendo sueldo. George, quien fue un fiel mayordomo, dijo:
“No he servido a un amo cruel,
y eso es lo que me da gozo de demostrar”.
Yo no estoy sirviendo a un amo cruel, y muchos de nuestros hermanos que han entregado su vida a Jesús tampoco… y usted amigo, quiere servir eternamente a un amo cruel que es Satanás y sus demonios?
Encarecidamente le pido: Pídale al Señor que salve su alma, que traiga arrepentimiento y fe a su vida y que pueda decir feliz como nosotros “No hemos servido a un amo cruel” pues en esta tierra carga con nuestras angustias y tristezas y nos llevará con El a la eternidad.
Oremos…
Por.
Nelson Ramiro Parodi Díaz
Septiembre 9 de 2018
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